Es un desarrollo muy reciente de dos científicos en una
universidad norteamericana. Para comprender como se logra obtener este producto
que tendría las llamadas propiedades auto desinfectantes, podemos comenzar
hablando de la obtención de la famosa fibra que sabemos se encuentra en la
mayoría de nuestras prendas de vestir. Como sabemos el algodón es una fibra natural que se
obtiene de un arbusto del género “Gossypium” que incluyen unas cuarenta especies
más también productoras de esa fibra. Todas son originarias de la India y la
mayor parte de estas especies se han desarrollado o se han criado para adaptarse
al los diversos medioambientes del planeta, bastantes son de origen silvestre.
Hay que hacer notar un hecho en particular, pocas son las especies que producen
un algodón blanco, la mayoría son de color entre marrón y rojizo, algunas entre
amarillas y verdes, cosas que un blanqueador puede corregir fácilmente pero en
general se buscan las variedades que producen un algodón blanco. La facilidad de
su recolección, color, firmeza y versatilidad lo han convertido en la fibra
natural por excelencia para la producción de ropa. También sabemos que la
capacidad que tienen estas fibras de retener el agua las convierte en ideales
para vendajes y para la limpieza de tejidos. De allí que sea importante
encontrar una manera de que estas fibras permanezcan libre de microorganismos no
solo para su uso médico además sería muy útil contar con ropa que fuera
resistente a la influencia de bacterias y microorganismos sobre todo en el caso
de personas que tienen sensibilidad a infecciones en la piel.
Durante más de
cuarenta años, si no es que más tiempo, se han hecho experimentos para tratar de
obtener una sustancia que se adhiera a las fibras de algodón e impida el
crecimiento de las bacterias. En cuanto a esto último nunca ha faltado el éxito
pero en cuanto a que la sustancia se adhiera a las fibras de algodón la cosa no
ha sido tan fácil. Otro problema era la estabilidad de las sustancias mismas, se
degradaban con cierta rapidez cuando eran expuestas al medio.
La nueva propuesta
en ese sentido es una sustancia denominada 2-AQC que son las siglas (en inglés)
del ácido antraquinona-2-carboxílico. Aclaré que no estoy seguro de esa notación
en español, pero por lo menos esa debería ser la manera correcta de escribirlo en
español pues se nota que los traductores de los artículos en la red no conocen
bien la nomenclatura de la química orgánica española, de la cual manejo los
rudimentos con cierta corrección y es por ello que me atrevo a traducir el
nombre. Esta sustancia, que vendría a ser literalmente un algodón auto
desinfectante, se adhiere fuertemente a las fibras de algodón y cuando
la luz incide desprende radicales libres del tipo de los peróxidos que son muy
tóxicos para las bacterias y son relativamente inicuos en la piel.