El London Eye es una rueda ubicada en Londres, Inglaterra. Es
la más alta de Europa con 135 metros de altura. Se conoce como Rueda del Milenio
y es además de una atracción mecánica, un mirador. Es la atracción pagada más
visitada del Reino Unido con más de 3 millones de personas al año.
Fue inaugurada el 31de diciembre de 1999 a las 20:00hrs. Y
abierta al público en Marzo de 2000. Muy pronto se convirtió en un ícono mundial
y en un símbolo del Reino Unido. En 2002 ya había sido visitada por más de 8
millones de personas. Fue diseñada por David Marks y Julia Barfield, esposos y
arquitectos. La realizaron como una metáfora del cambio al siglo XXI. Se
encuentra junto a los Jardines Jubilee y el río Támesis.
En el London Eye los pasajeros suben a unas cápsulas únicas en cuanto a diseño
para una rueda observatorio. Son 32 cápsulas que representan los 32 distritos de
Londres. Tienen una vista panorámica de 360º; los pasajeros tienen la
posibilidad de observar 40 kilómetros de Londres en todas las direcciones.
Cada cápsula tiene una capacidad para 25 personas. Cada una
de ellas pesa 10 toneladas lo que hace que la rueda gire muy lento. La rotación
dura 30 minutos por lo que la rueda no necesita parar para que la persona salga
o entre a la cápsula. Se ofrecen varios tipos de viajes: de día, de noche, viajes
cortos y también con Champagne. Todos tienen pecios diferentes. También hay
viajes especiales para niños.
Al comprar la entrada para el London Eye hay muchas alternativas para combinar
el viaje maravilloso del London Eye con visitas a museos, noches en hoteles de 5
estrellas o con derecho a otra atracción de la ciudad. Como dato curioso te cuento que muchas parejas arriendan las
cápsulas para el día de San Valentín y muchas otras pagan increíbles sumas de
dinero para casarse en una de las cápsulas.
Después de siete años de construcción y la intervención de
más de 200 personas, London Eye se ha convertido en un lugar imperdible. Lo
respaldan sus más de 75 premios nacionales e internacionales que ha ido ganando
desde su construcción.
Una de las épocas favoritas para visitar esta atracción es
para el año
nuevo. Junto al río Támesis, el London Eye es el escenario de 10 minutos de
hermosos fuegos artificiales. Esta práctica se convirtió en tradición desde el
año 2005.