Para la Organización Mundial de la Salud (OMS), el tabaquismo
es una dependencia a la nicotina del tabaco. Esto genera diversas
enfermedades en el cuerpo humano, después de que esta sustancia y otras entran
al torrente sanguíneo en cada inhalación.
Así, el tabaquismo es una de las principales patologías, que
provoca muertes de manera prematura. Cada año, son cientos de miles, los
fumadores que mueren. Asimismo, son miles las personas que aspiran, de manera
pasiva, el humo que emana de los cigarrillos. Nos referimos a aquellos fumadores pasivos. O sea, las personas que
conviven con el humo del cigarrillo, sin necesariamente, fumarlos de manera
personal.
La principal sustancia dentro de los cigarrillos, es la
nicotina. Un tipo de droga, bastante tóxica, para nuestro organismo. Y hablamos
de ella, ya que es la principal causa, de la adicción hacia el cigarro. Esto, ya
que es el ingrediente activo del humo del cigarro. Incluso, de manera bastante
concentrada, la nicotina puede ser utilizada como un potente insecticida.
En cuanto a los cigarrillos, estos contienen un porcentaje,
que varía desde el 2% hasta el 7% de nicotina, cada uno de ellos. O sea, en una cajetilla de
cigarros, en la cual vienen 20 cigarrillos, uno aspira algo así como el equivalente a
1 cigarro de nicotina pura (este es un promedio estimable).
Los efectos de la nicotina, son inmediatos. Ya que esta actúa
en el sistema nervioso autónomo. Sólo con ello, se vuelve un componente
altamente peligroso, para la vida de los seres humanos. Asimismo, la nicotina
puede llegar a producir graves trastornos en las vías respiratorias, e incluso
ocasionar paros respiratorios, por medio de la formación de enfisemas pulmonares.
Asimismo, puede provocar bajas o altas de presión y taquicardia.
Peor aún, es su efecto en el sistema sanguíneo, mediante el cual, puede
llegar a provocar serios problemas cardíacos, llegando en casos extremos a un
paro cardíaco fulminante.
Ya que la nicotina, ayuda a que se forme sarro, en las arterias, con lo cual no
llega el oxigeno suficiente al corazón, lo cual produce progresivamente la muerte de los
tejidos musculares del corazón.
De igual manera, el tabaquismo puede llevara generar cáncer
al pulmón y disfunciones de tipo eréctil. Asimismo, en la etapa del embarazo,
las mujeres que padecen de esta adicción, tienen mayores probabilidades de tener abortos espontáneos,
muertes neonatales y tener hijos de bajo peso al nacer. Aparte de transmitirles
la adicción a la nicotina.
Por otra parte, existen ciertas clasificaciones para los
fumadores, en cuanto a la cantidad de cigarrillos que se llegan a fumar. Lo
cual deriva en fumadores leves, que son los que consumen menos de 5 cigarrillos
en promedio por día. Tienen hasta 15 veces mayor probabilidad de padecer cáncer
de pulmón que la población no fumadora. Están los fumadores moderados, que son
aquellos que fuman entre 6 y 15 cigarrillos promedio por día. Aumenta hasta 40
veces las probabilidades de cáncer de pulmón, en los fumadores de esta
categoría. Por último, tenemos a los fumadores severos, que son los que llegan a
fumar más de 16 cigarrillos por día en promedio. En esta categoría, se
incrementa hasta 60 veces la probabilidad de padecer cáncer de pulmón.
Y ahora, ¿por qué es tan difícil dejar de fumar?. Lo que provoca
que la nicotina sea adictita,
es que aumenta la cantidad de dopamina en nuestro organismo, lo que produce una
sensación de placer o bienestar, con lo cual, el ser humano tenderá a repetir el
ejercicio de fumar, para poder volver a sentir lo mismo.
Es así, como a las 48 horas siguientes del último cigarro, se
tendrá desarrollará una sensación de ansiedad, vacío, problemas para dormir e
irritabilidad. Es por lo mismo, que las personas vuelven tan rápido a este hábito, luego de
intentar dejarlo. Es por ello, que es tan difícil dejar de fumar.
Por lo mismo, es que se han desarrollado
diversos tratamientos para el tabaquismo.
Dentro de los sistemas más utilizados, tenemos los chicles y los parches de
nicotina. Los cuales liberan pequeñas dosis de nicotina, hasta el punto que el
cuerpo, se desintoxica y deja de pedir tan nefasta droga, para nuestro
organismo.
De todas formas, no se recomienda el uso muy prologando de
estos dispositivos. No más de algunos meses, ya que pueden provocar daños en las
células de los pulmones y de los vasos sanguíneos. Y como con toda condición
médica, siempre se debe consultar a un especialista.