La poda ornamental, también conocida como topiaria (del latín
topiarius, el creador de topia, o sea lugares bellamente ornamentados), es
aquella poda que busca utilizar especies vegetales como árboles y arbustos, para
embellecer un lugar, dando a las plantas en cuestión, formas y diseños. En la
poda ornamental, las formas que se pueden lograr son muy variadas, pudiendo ser
geométricas, como círculos, triángulos, conos, cilindros, cuadrados, etc., como
también de fantasía, como animales o imitaciones de edificios famosos.
La poda ornamental tiene sus orígenes en Europa, partiendo en
los jardines romanos antiguos y continuando en Italia en la época del
renacimiento. Desde ahí se comenzó a esparcir por Europa. Las formas eran
redondeadas y geométricas, como esferas, corazones, conos, obeliscos, pirámides,
cubos, etc. Destacaron jardines franceses, ingleses, holandeses, entre otros.
También en China y Japón es una práctica antigua. En la actualidad, es una
actividad popular en muchos lugares. Personas en todo el mundo practican esta
técnica en sus propios jardines. Algunos países cuentan con jardines admirados
en todo el mundo como Australia, China, India, Tailandia, Estados Unidos,
Inglaterra, Escocia, Costa Rica y otros.
La poda ornamental es considerada un arte que requiere mucho
cuidado y atención. Los árboles y arbustos más adecuados, son formados mediante
cortes especializados, con el fin de llegar a obtener resultados estéticos, que
en ocasiones son impresionantes. Todo debe ser muy bien estudiado para crear una
obra adecuada en relación al entorno. Además, las formas más complicadas, como
los animales, requieren mucho tiempo de preparación. En este caso, también se
utilizan armazones que permiten que la planta crezca de la forma deseada. Una
vez que ha adquirido suficiente follaje, se corta siguiendo la forma del
armazón.
Es importante saber que al utilizar esta técnica, el jardín o
el espacio en donde se aplique, debe ser constantemente mantenido. Las podas
deben ser periódicas o, de lo contrario, los brotes sobresalientes harán que el
trabajo parezca descuidado. Todo dependerá de la velocidad de crecimiento del
árbol o arbusto. Algunos son de crecimiento rápido, por lo que se repasan una
vez al mes. Los de crecimiento lento, requieren repasos una vez al año. Entre
las especies más utilizadas en la topiaria o poda ornamental se encuentran el
aligustre, el ciprés, el ficus, el laurel, el tejo, el acebo, el boj, la hiedra,
el mirto, el pitosporo, el evónimo, y otros.