La verdad es que es bueno que se les llame “piojos”, usando
el plural pues no se trata de una sola especie animal, sino que se trata de muchísimas
especies de insectos: se calcula que unas tres mil doscientas y tantas en todo
el planeta. Eso sí todos pertenecen al orden de los ftirápteros (Phthiraptera)
que se caracterizan por ser insectos sin alas, con antenas muy cortas, no
experimentan una metamorfosis completa como los otros insectos (por ejemplo no
presenta la etapa de pupa) y como característica muy propia todos lo ftirápteros
son ectaparásitos, es decir, parásitos externos que necesitan vivir en la piel
de su huésped.
Me acuerdo que hace mucho tiempo hablábamos de dos grandes
grupos: los anoplura y los mallophaga. Los anoplura eran llamados los
“chupadores” o “hemátofagos” porque necesitan alimentarse con la sangre de su
huésped y son muy propios de los mamíferos, dentro de ellos los piojos de cabeza
y ropa.
Los mallophaga eran llamados “malofagos” o “masticadores” se alimentan
de trocitos de piel, de pelos y cualquier cosa que recojan en la superficie de
la piel, estos se encuentran en los mamíferos pero su gran especialidad, por
decirlo así, son las aves; con los ácaros son los que es encargan de mantener la
piel limpia y como ocurre con los ácaros, algunas personas tienen alergias
relacionadas con sus heces y también son responsables de algunos tipos de asma y
enfermedades de tipo alérgico.
Hoy día se les llama “ischnocera” a los malófagos
y se habla de dos grupos más, relativamente pequeños, los “amblycera” que son
masticadores muy antiguos y primitivos que encontramos en muchas especies de
aves; el otro grupo son los “rhynocophthira” que se caracterizan porque su bocas
forman una estructura muy alargada especializada en “perforar” pieles gruesas
como las de los elefantes y jabalíes, que son básicamente las especies en las
que viven, de hecho si no fuera por la costumbre que tienen elefantes y jabalíes
de frotarse los cuerpos entre sí, a estos parásitos les sería muy difícil pasar
de un individuo a otro debido a su alta especialización.
Por último las liendres
son los huevos que ponen los piojos, la palabra latina que le da origen a
liendre se puede traducir como molino y me imagino que hace referencia a la
forma de pequeños granos (blanquecinos) en medio de los bucles del cabello. Las
liendres son generalmente el síntoma que más asusta a las madres, que las
encuentran cuando se detienen a observarlas mientras peinan a sus hijos, por
otra parte los niños no suelen quejarse de la comezón a menos que sea muy
avanzada.
Las liendres en una persona pueden estar vivas, muertas o
eclosionadas. Si están muertas o eclosionadas por todo el cabello y no se
encuentran piojos vivos es muy seguro que no se necesite tratamiento, el por qué
mueren de pronto, nadie lo puede decir con exactitud y al parecer no es una
cualidad genética del huésped, puede ser algo propio del sistema inmune de la
persona (que es poco probable) o algún problema genético del piojo (debemos
recordar que estas especies pueden experimentar mucha endogamia).
Es obvio que
si las liendres están vivas, se puede apreciar porque están “regordetas” y
tienen buen color (el color blanquecino que se mencioné antes), entonces es
necesario el tratamiento, por ciento, hay muchos tratamientos caseros pero es
mejor que se consulte con un médico. El tratamiento para los piojos hoy en día,
suele incluir medicamentos (por extraño que parezca efectivamente los hay por
vía oral, y son bastante efectivos), champú especial y peines para sacar las
liendres (son peinetas de un diseño tal que la separación entre los "dientes" es
menor a medio milímetro, con lo que se arrastran las liendres). Otras formas de
tratamiento incluyen además del peinado especial, una "aspiración" efectuada con
máquinas especiales en grupos de cabellos. Es importante señalar que
tratamientos caseros como el aceite de oliva, el vinagre o la mayonesa, no han
demostrado ser efectivos.
A manera de información interesante o
curiosa, el piojo genital o púbico ha entrado en extinción en muchos lugares
debido a la nueva costumbre de depilarse el bello púbico, lo que llaman la
depilación brasileña lo cual ha agradado mucho a los médicos, la cuestión es
¿qué pensarán los partidarios del conservacionismo?